Por el Abandono a la Paz del Padre Ignacio Larrañaga




Algunas de las ideas de esta hermosa reflexión:
Un abandono activo.
Un morir a lo destructivo, a los resentimientos, a la vergüenza, a la lástima.
Hay que decir no a todo brote negativo y agresivo del corazón.
Descansar es paz.
De nosotros depende acoger las cosas como amigas o como enemigas.
Nos reconciliamos con todo lo que nos acontece. Cuando lo logramos encontramos la paz.
Cuando dejamos lo que nosotros no podemos solucionar en la manos de Dios, encontramos paz.





Comentarios

Entradas populares de este blog

"Sáname Señor" - Ricky Penman Schmidt

¡Viva Santa Cruz!

Y al final me llamaron Patricia

LAUDATO SII, MI SIGNORE

Para elegir terapeuta